Chiesa della Badía Nuova
La iglesia de la Madonna di Monte Oliveto, también conocida como Badía Nuova, o Badiola, es un edificio barroco situado a lo largo de la Via Incoronazione (ver ubicación), la calle que sigue el perfil de la fachada norte de la Catedral de Palermo. Se trata de una iglesia conventual que perteneció a la Segunda Orden de San Francisco, u Orden de Santa Clara. En la actualidad pertenece, con su convento, al Seminario Arzobispal.
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La iglesia permanece habitualmente cerrada a las visitas. La fachada puede verse en buena perspectiva desde la Piazza Sett'Angeli, una plaza frecuentada por los turistas que acuden a ver los mosaicos árabe-normandos del exterior de la Catedral.
El origen de la iglesia
El convento de clausura fue fundado en 1512 utilizando el solar del antiguo palacio arzobispal cuya sede, en el siglo anterior (1460), había sido trasladada al nuevo Palazzo Arcivescovile construido frente la fachada de la Catedral.
Al quedarse pequeña la originaria capilla del palacio arzobispal, titulada a Santa Maria di Monte Oliveto (de aquí el nombre de la iglesia y del convento), se construyó la actual iglesia barroca, consagrada en el año 1623. El nuevo edificio fue diseñado por el arquitecto Mariano Smiriglio.
El portal
El portal del templo sobresale de la estructura del edificio. En el tempano abierto, que se sostiene sobre dos columnas monolíticas, se ve el Escudo de la Orden Franciscana, los dos brazos cruzados sobre la Cruz. Sobre el portal puede verse un nicho con la estatua de la Madonna di Monte Oliveto.
El interior de la iglesia
El interior de la iglesia conventual se caracteriza por una única nave, cubierta por una bóveda decorada por los frescos de Pietro Novelli, el conocido pintor nativo de Monreale. El fresco principal, situado al centro de la bóveda en un marco octagonal, representa la Ascensión de la Virgen. A el se suman los demás frescos donde se representa un ciclo dedicado a la vida de los Santos Franciscanos.
Otro artista del barroco palermitano que ha participado en la decoración de esta iglesia es Giacomo Serpotta. Con la ayuda de su hermano Giuseppe decoró en 1693 el sotacoro, cuyos frescos son obra de Filippo Tancredi, quien también pintó los frescos de las iglesias de San Giuseppe dei Teatini y de Casa Professa.
El coro alto
El coro alto, como de costumbre en las iglesias conventuales de clausura, está separado por una reja de hierro y por una luneta que le separa de la bóveda. Le proporcionan luz las dos ventanas laterales del primer cuerpo de la fachada y el ojo de buey situado más arriba, cuya luz, gracias a un arco abierto en la luneta del coro alto, llega también al interior de la iglesia.
Los cuatro altares laterales
En el primer altar del lado oeste (izquierdo), hay un cuadro que representa los Mártires Franciscanos, pintado en 1765 por Gioacchino Martorana (Palermo 1735-1779), un artista de cierto nivel especializado en pintar obras para la aristocracia de Palermo, a la cual solían pertenecer las monjas de clausura de este convento.
En el primer altar del lado este, dedicado a San Francisco de Asís, se encuentra una pintura de Pietro Novelli que representa San Francisco de Asís entrega el cordón de la Orden a San Luis de Francia.
Los dos altares laterales mas cercanos al presbiterio están adornado por unas esculturas.
En el altar del lado oeste, dedicado al Crucifijo, se encuentra un Cristo en tamaño natural tallado en madera durante el siglo XVII. Detrás está el reliquiario de la iglesia. Allí se custodian las reliquias de algunos santos franciscanos .
En el altar del lado este (derecho) está el altar dedicado a la Virgen María, decorado con una estatua de la Virgen con el Niño. La estatua fue esculpida, en mármol blanco de Carrara, por Filippo Pennino, quien también esculpió la fuente bautismal de la cercana Catedral.
El arco frontal del presbiterio
El arco frontal del presbiterio, y la luneta de la bóveda, están decorados por estucos de Giovanni Maria Sepotta, nieto de Giacomo Serpotta, quien les dio forma en 1758. El tema principal de las decoraciones se encuentra en la luneta donde se representa la Madonna di Monte Oliveto, a la cual está consagrada la iglesia.
El presbiterio
El presbiterio tiene una anchura más reducida de la nave. Está precedido por una plataforma a la que se accede a través de una escalera piramidal de cuatro peldaños. En ella se encuentra la mesa de altar orientada hacia los fieles. No hay balaustrada que separe el área ceremonial del resto de la iglesia.
El cuadro de altar, de grandes dimensiones, fue pintado en 1818 por Giuseppe Patania, artista que operó en Menorca, Nápoles y Palermo durante la primera mitad del siglo XIX. En el se representa la Alegoría de la Redención.
El altar mayor
El altar mayor de estilo neoclásico se remonta al año 1818 y está enteramente realizado en preciados mármoles policromados y piedras duras. El relieve del frontal de altar, en bronce dorado, representa el Cordero de Dios mientras los laterales, también en bronce dorado, son de inspiración bíblica .
La sacristía (Capilla de las hermanas Spatafora)
Desde el presbiterio, a través de una puerta situada en la pared izquierda, se accede a la sacristía, también llamada Capilla de las hermanas Spatafora en recordatorio de las tres hermanas Spatafora que, en 1796, subvencionaron su reforma.
Las paredes laterales muestran unos frescos enmarcados por unas decoraciones de estuco, entre los que destacan una representación de San Francisco de Asís y de la Última Cena.
En la pared izquierda, colindante con el convento, se encuentra el altar barroco decorado con mosaicos de mármoles policromados y estucos.
La bóveda está decorada por un ciclo de frescos de Filippo Tancredi que representa escenas de la vida de María y que culmina con el fresco principal, al centro, dedicado a la Coronación de la Virgen.
